El Tequila es considerado el regalo de México para el mundo. Un destilado que cada día sorprende a cientos de paladares con un abanico de sabores que van desde los cítricos hasta el chocolate amargo y la canela - como el Tequila Don Julio Reposado- y que además representa parte de la cultura del país azteca.
Algo de historia
Durante la época precolombina, los habitantes de lo que hoy se conoce como el hermoso Paisaje Agavero, ubicado entre el Volcán Tequila y el valle del río Grande de Santiago, al occidente de México, utilizaban las hojas de la planta de agave para la confección de abrigos, elaboración de herramientas y, del corazón de la misma, después de un proceso de fermentación, mieles y jugos para alimentarse.
Con la llegada de los españoles, el proceso de destilación se convierte en una gran herramienta que años después se conoce como el “vino mezcal de Tequila”, que no es nada más que el resultado de la previa fermentación de los jugos del agave y su posterior destilación.
Hacia el siglo XVI, salen a la luz las primeras botellas de Tequila y con ellas el símbolo de unión entre dos culturas, pues la combinación de una materia prima 100% americana con un proceso de producción europeo, llegarían a convertirse en una bebida única con cientos de fanáticos en todo el mundo.
El arte de producir Tequila
El trabajo artesanal de los productores de Tequila es reconocido a nivel mundial. La siembra, poda y riego de la planta; el corte de las piñas o corazones del agave; la cocción lenta en hornos de barro; la fermentación; destilación y añejamiento suman años de trabajo ininterrumpido que es transmitido de generación en generación. Sin duda una importante labor muy respetada en la región.
Así que, si tienes una botella de Tequila en tus manos, tienes un pedacito de la cultura mexicana en ella. Abre esa botella, continúa leyendo y celebra con nosotros el Día Internacional Del Tequila.
En México, existen cerca de 200 tipos de agave –planta autóctona de ese país- pero es solo el Agave tequilana Weber variedad azul, plantado en 5 estados de México, el que da vida a los cientos de botellas de Tequila que se producen en el país. Es tan limitado y especial que desde 1974 cuenta con una Denominación de Origen, la primera del país azteca, que obliga a las casas productoras a plantar y producir la bebida bajo unas condiciones geográficas y de elaboración que han posicionado al destilado en todos los rincones del mundo.
Paisaje Agavero, Patrimonio de la humanidad
Desde el 2006, la Unesco declaró como Patrimonio cultural de la humanidad el “Paisaje Agavero y las Antiguas Instalaciones Industriales de Tequila” una extensión de 34, 658 hectáreas que han sido testigo de la historia y el trabajo artesanal que requiere la elaboración del Tequila.
Nuestro recomendado, sin duda, Tequila Don Julio. Una casa productora 100% buenvivir, llena de tradición, calidad y espíritu de curiosidad que marca la diferencia.
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Datos de interés
- Se necesitan 8 libras (3.6 kilos) de agave azul para producir una botella de Tequila.
- El Volcán Tequila y el lenguaje de los antiguos nativos “Tiquili” son los responsables del nombre de esta bebida.
- Existen 5 tipos de Tequila: Blanco, Joven, Reposado, Añejo y Extra Añejo.
- La producción de Tequila varía entre 8 a 13 años. Esto dependerá del tipo de tequila y del tiempo que tarde la planta de agave en alcanzar su máxima concentración de azúcar.
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Si quieres aprender más de este destilado, consulta la información de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera.